Realizar mi perfil del Programa de Creatividad, Actividad y Servicio del IB, fue una experiencia de reflexión que me permitió reconocer cómo cada parte de mi vida desde el deporte hasta mis vínculos personales ha contribuido en la construcción de la persona que soy. A través de este proceso, pude conectar mi pasión por el fútbol con valores que nos han enseñado en nuestro colegio como el compromiso, la empatía, el liderazgo y el respeto. Fue también una oportunidad para reafirmar mi propósito de crecimiento, tanto personal como colectivo, y de ver cómo mis acciones pueden tener un impacto positivo en otros, pero sobre todo en mí mismo. El atributo del IB que más se refleja en este camino es el de ser íntegro, ya que me esfuerzo constantemente por actuar con honestidad, responsabilidad y coherencia, en todos los ámbitos de mi vida como el académico, deportivo y en este nuevo reto que es el programa CAS del Bachillerato Internacional.
La realización de mi perfil del Programa de Creatividad, Actividad y Servicio ha sido una de las actividades que, personalmente, se me han hecho bastante complejas. No porque fuera una asignación en sí demandante, sino porque tenía que reflexionar bastante y realmente conocerme para poder desarrollarlo. Para aquellos que no saben, el perfil CAS permite la exploración de gustos, fortalezas, áreas de mejora y permite contemplar cómo este programa nos puede aportar para seguir desarrollándonos como mejores personas en nuestro día a día. Debo admitir que, aunque fue una experiencia enriquecedora, en muchos momentos sentí frustración y decepción porque me di cuenta de que no me conocía en absoluto. Sin embargo, agradezco mucho haber podido llevar a cabo un proceso que me permitió explorar y experimentar sobre mi persona. Y, a pesar de que mucha gente considere que esto se hace por obligación, incluso considerando que es un requisito del programa, es una experiencia y actividad de autoconocimiento que permite que llegues más allá.
En mi proceso descubrí que una de mis mayores fortalezas es la capacidad de liderazgo y organización, lo cual se reflejó al coordinar actividades de servicio en mi comunidad. También descubrí áreas de mejora como mi manejo de la frustración o miedo al rechazo; ese reconocimiento me va a permitir crecer y mejorar mi confianza en mí misma. Por último, me gustaría mencionar que en este proceso tuve la oportunidad de trabajar y conocer mejor los atributos y resultados del aprendizaje del IBDP. Gracias a esto, considero que el atributo de “reflexivo” me representa, ya que Creatividad, Actividad y Servicio me permite reconocer mis áreas de mejora y crecer a partir de ellas. Para finalizar, me encuentro inmensamente agradecida por la oportunidad de trabajar con el apoyo y retroalimentación constante de nuestro docente, Ricardo Toncón, en esta actividad tan bella y reflexiva.